Hay
momentos en la vida en la que lo único que nos queda son las ruinas, pedazos
regados en el suelo, de sueños, amores, amistades, confianza , etc. De cada uno depende seguir llorando los
escombros en los que queda convertida la vida o usar eso como relleno para que
las bases sean más fuertes e indestructibles.
Cada
dolor o decepción debe tener su fecha de vencimiento, por eso debes darte
tiempo y espacio para sentir lo que debas sentir, ignorar que algo o alguien te
hizo daño es el primer paso para estancarse, por eso no podemos negarnos la
oportunidad de fluir con el tiempo y con la vida, ahora, quedarnos en el pasado
es algo que nunca va a aportarnos nada de valor, de los errores se aprende para
mejorar sino hay nada rescatable de ello, simplemente se sigue adelante.
¿Cómo
se construye con el dolor? Seguramente alguna vez en tu vida has visto una mega
construcción, cada una de ellas necesita un relleno que se compone de escombros
de construcciones destruidas, aun lo que se desecha tiene un uso útil, eso
mismo puedes hacer con tus derrotas, úsalas como material de relleno, hazte
fuerte reconociendo los pedazos que han quedados regados en la arena, recicla
tu tragedia personal y permite que eso te haga mejor de lo que seguramente ya
eres, que hayas fallado o que te hayan fallado no significa que no vale la pena
volver a empezar, empieza cada día de nuevo, pero por encima de todo, ama quien
eres y no permitas que nadie te convenza de que no vales la pena.
Termina
con todas aquellas relaciones insanas que no aportan más que drama y dolor a tu
vida, ten el valor de escogerte a ti antes que a cualquier persona, no se trata
de egoísmo es supervivencia básica, no contamines tu propio ecosistema, no
destruyas el aire que respiras, lo que te hace suspirar, lo que da sentido a
levantarte todos los días en la mañana, ¿Alguna vez te ha costado levantarte?
Una vez hace ya varios años, una conversación telefónica destruyo mi vida, no
pude dormir, cerraba los ojos y en el silencio de la noche escuchaba como mi
corazón se partía en pedazos con cada latido, por una semana entera no dejaba
de pensar en esas palabras que me habían destruido desde la vida hasta los
sueños, pero de todo eso aprendí que por mucho que ame a alguien su concepto a
cerca de mi aunque sea cierto no debe definir mi valía y mucho menos debe
destruir el amor que debo profesarme a mi antes que a cualquier persona sobre
la tierra, y si alguien tiene toda una lista de razones para no estar conmigo,
un memorial de agravios a todo color tatuado en sus manos para señalarme cada
vez que haya oportunidad, es mejor irse
de allí y seguir con la vida, porque nadie merece el precio de tu propio valor.
Corta
el cordón umbilical, que tu autoestima no se alimente de lo que piensen o no
los demás de ti, que tu vida entera deje de girar alrededor de cualquier
persona por mucho que la ames, sea cual sea el vínculo, no te dejes a ti misma
por estar con alguien.
Eres
valiosa y naciste para ser feliz.
